Remendare

Se dijo para si: «remendaré mi vida».

Lo miró y se dió cuenta: que una vez más debía volver a empezar. Le besó y le dijo: Adiós.
Las palabras empezaron a fluir de nuevo, escribiría su historia remendando retazos de: sus recuerdos, sueños, decepciones, polvos, ilusiones……; usaría el mismo patrón pero esta vez decidiría las texturas, los colores, los estampados y los bordados. Le dará a ellos un final más digno que el que acaba de rematar en aquella mesa.
Y es ahí donde Pedro, Juan y Camila le encuentran.

Remendare es una intersección entre su vida real e imaginaria. Nace de la contradicción y contraposición entre su realidad y el mundo que ha creado para si misma. Es una vía de escape para ese universo que se expande y que su finita piel apenas puede contener. Es una necesidad, es un alivio, es su forma de sobrevivir, su lucha contra la desidia y el sin sentido de una realidad en la que ha aprendido a vivir y a fingir pero que le resulta ajena.

Nace de sus frustraciones, de su esperanza, de su poca suerte en el amor, de sus pasiones más bizarras y de anhelos más clásicos.

Es una medida desesperada, para mantenerse en equilibrio en un mundo sin el mínimo balance, es una excusa para poder seguir fingiendo que no ha perdido la «cordura».